EL SELLO DE LA IRA

«Yo creía que los niños estábamos a salvo en las guerras», comenta el pequeño a su viejo amigo Dupont. La vida del muchacho nunca fue fácil. Tras los bombardeos de Barcelona durante la Guerra Civil, una gran cantidad de personas se ven arrastradas al éxodo, abandonando su hogar en busca de un futuro incierto. El camino es duro: el frío, el hambre, los bombardeos, los bandoleros… La muerte será su compañera inseparable hasta el fin de sus días. Después de su duro paso por un internado, es reclutado por una importante sociedad secreta que, desde hace milenios, rige los designios de la humanidad desde la oscuridad. Esta entidad mueve los hilos y el rumbo del mundo, ocultándose tras las bambalinas de la iglesia católica. Bajo los hábitos de sacerdote, se esconde un despiadado asesino; la mano ejecutora. La historia da un giro inesperado cuando, ya mayor, diagnostican a Emet un cáncer terminal. Unos pocos meses lo separan de la muerte y aún tiene un asunto personal por resolver. Consciente de las consecuencias que conlleva actuar por cuenta propia y desobedecer a «La Comunidad», emprende un viaje hacia Andorra, donde tendrá lugar su última misión: la anhelada venganza. Los acontecimientos se desarrollan desde los años 30 hasta bien entrados los 80, intentando revestir la ficción con la dura realidad de unos tiempos convulsos. La trama, con una fuerte crítica hacia el poder, sigue un ritmo frenético de principio a fin que te mantendrá absorto.