Cuando Edward De Bono propuso el concepto de pensamiento lateral, quizá no sabía que estaba iniciando una silenciosa revolución en el campo del pensamiento que ha acabado extendiéndose por todo el mundo. Luego, en 1969, se adelantó al menos veinte años a su propia época al sostener que el cerebro es un sistema de información que se organiza a sí mismo. Ahora, en este libro, De Bono parte de la idea de que quejarse, protestar, despotricar, criticar y atacar resulta, en realidad, demasiado fácil. Las revoluciones tradicionales, en este sentido, suelen señalarse un enemigo y fijarse la obsesiva meta de derrotarlo, suponiendo que, una vez liberadas de los obstáculos principales, todo deberá salir forzosamente bien. Para muchas personas, sin embargo, este tipo de negatividad no resulta en absoluto suficiente, puesto que necesitan ser constructivas y creativas y contribuir a que sucedan las cosas. Pues bien: éstas son las personas que mejor aceptarán la revolución positiva que propone De Bono en este nuevo y estimulante libro, una guía práctica para promover una revolución seria, en la que no existan enemigos y donde sólo se intente mejorar las cosas.
Se trata, pues, como dice el propio autor, no de un libro para leer, sino, más bien [de] un libro a partir del cual trabajar , y además dotado de una estrategia muy clara, pues los cinco principios básicos de la revolución positiva quedan perfectamente representados en el símbolo de la propia mano humana: así, mientras el pulgar indica la eficacia, el índice nos señala el camino (constructivo) que debemos seguir, el dedo mayor corresponde a los valores humanos, el anular a la autosuperación, y el meñique a las contribuciones que todos podemos realizar para la buena marcha de las cosas. Tras leer este libro -nos dice De Bono- [�], tal vez algunos pensadores lleguen a considerar el negativismo no como el ejercicio más elevado de la inteligencia sino como el llanto de un bebé que no tiene otra forma mejor de llamar la atención y que no puede realizar otro acto.