«Hay efemérides en que conmemoramos acontecimientos tan
relevantes de la vida de las personas y de la historia de las
instituciones, que merecen ser recordados con gratitud, ya que la
significación que tuvieron en su momento no ha perdido
capacidad de inspirar y de fecundar el presente. Olvidarlos nos
empobrecería. En este libro rescato algunos escritos en torno a
tales hechos memorables que pueden actualmente tener algún
interés. Han acontecido hace tiempo, pero su palabra no ha
enmudecido.
El retiro de las actividades, a veces exigentes, es una puer¬ta
abierta para una dedicación más detenida y sosegada a la oración
y al cultivo del espíritu. La actividad exterior cede primacía a la
interioridad.
Es un tiempo de descanso de los trabajos anteriores; se van
experimentando las limitaciones en todos los órdenes; las
penalidades de la vida y la soledad son compañeras cotidianas; la
sintonía con la voluntad de Dios inclina a comprender que la
ancianidad es también una edad preciosa de la vida.
Al terminar este periodo de la existencia, que se prolongará lo
que Dios quiera, le doy gracias, porque me ha conservado la vida
hasta los 80 años. En sus manos estoy con serenidad y confianza