Pop. Una palabra que ha conquistado el mundo. Tres letras. Un vocablo capicúa que refleja el complejo universo de la música popular de este siglo. En una segunda lectura, a pesar de su estructura capicua, el termino encierra, a los ojos del profano, algunas contradicciones. Al tratarse de musica para el pueblo ¿por que el lenguaje musical que la argumenta se presenta cada vez mas y mas hermetico? ¿Es inevitable el uso de un sinfin de anglicismos, que espantan al aficionado, y sacralizan al especialista? La informacion musical es cada dia mas exclusiva de un grupo de entendidos que se alejan de quienes la consumen. ABC de la musica moderna pretende, en forma de diccionario, huir de la erudicion y desenmarañar un ovillo de informacion, con un abanico de definiciones subjetivas, recomendaciones discograficas y valoraciones musicales explicadas, y un anecdotario rico en curiosidades. Andres Rodriguez no olvida que una melodia, una percusion o un ritmo valen mas que mil palabras.Pop. Una palabra que ha conquistado el mundo. Tres letras. Un vocablo capicúa que refleja el complejo universo de la música popular de este siglo. En una segunda lectura, a pesar de su estructura capicua, el termino encierra, a los ojos del profano, algunas contradicciones. Al tratarse de musica para el pueblo ¿por que el lenguaje musical que la argumenta se presenta cada vez mas y mas hermetico? ¿Es inevitable el uso de un sinfin de anglicismos, que espantan al aficionado, y sacralizan al especialista? La informacion musical es cada dia mas exclusiva de un grupo de entendidos que se alejan de quienes la consumen. ABC de la musica moderna pretende, en forma de diccionario, huir de la erudicion y desenmarañar un ovillo de informacion, con un abanico de definiciones subjetivas, recomendaciones discograficas y valoraciones musicales explicadas, y un anecdotario rico en curiosidades. Andres Rodriguez no olvida que una melodia, una percusion o un ritmo valen mas que mil palabras.