¡Genial, seis semanas sin clase! ¿Hay algo mejor? ¿Pero qué hacen papá y su amiguita? ¡Preparan un viaje en barco! ¡Qué bien! ¿Es que piensan que voy a estar todo el día viendo cómo se besuquean? Suerte que Wutz y la abuela también aparecen a bordo. ¡Pero aún queda lo mejor! Pues sin mi actuación de superhéroe el asunto del incendio habría acabado mal. Bueno, sí, también se debió en parte a Finn, pero… No voy a desvelarte nada más, ¡será mejor que lo leas tú mismo!
«Hola, me llamo Rick, tengo once años y medio y juego al hockey sobre hielo. Vivo con mi padre y su colega Wutz enuna casa cien por cien de tíos. ¡Hasta nuestro gato Gismo es un macho! Mi vida era ge