Rebelándose contra el sentido común que indica el pleno empleo depende del crecimiento, de las inversiones y tras variables macroeconómicas, Enrique Martínez explica casi un manual práctico cómo generar trabajo cambiando de raiz el sistema de pensamiento establecido, tanto en los gobernantes como en la propia sociedad. Partiendo de una idea tan simple como que trabajar es una necesidad humana y no solo un instrumento productivo, el autor desbarata una serie de argumentos tradicionales y aporta un novedoso perfil al drama de la desocupacion. Una primera condicion ? de caracter politico? es recuperar el sentido comunitario y la importancia que tiene que todos trabajen, explica el especialista. La segunda es identificar aquellos ambitos que aseguran la ocupacion masiva, determinando los recursos necesarios para hacerla efectiva. Y, finalmente, subraya la necesidad de verificar que esos recursos sean provistos. Es esta una obra poco frecuente porque no se queda en el diagnostico e invita a barajar y dar de nuevo.