Fernando Jiménez Ocaña

"María Uriel ignoraba que su formación le abriría las puertas a un futuro inimaginable. Que entraría por primera vez en un pais extranjero… sin salir del suyo. Que trabajaría en una ciudad r

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Esta novela, impactante y muy visual, narra las desventuras de Juan Euxinde Caranegra, un hombre de acción que acaba en presidio. Se van desvelando sus peripecias vitales en medio de la jauría humana, descrita con pulso barojiano y admirable acierto. Seguiremos sus pasos dentro del universo carcelario, con sus trapicheos, su fauna y sus modelos de supervivencia. Euxinde mantiene al lector aferrado a esta novela, de un realismo cinematrografico, mientras acompaña a Caranegra en la busqueda por alcanzar su redencion personal y dar un sentido a su existencia.

La novela Del laberinto al treinta , está enmarcada dentro del género de novela social, que comienza con el aviso de la policia a Davi, en su domicilio familiar , de la muerte de su esposa en circunstancias un tanto misteriosas: en principio se plantea el suicidio como causa más evidente. Este comienzo misterioso y policial nos introduce en un lugar muy familiar para todos: las calles de Zaragoza, una ciudad que se presenta aquí desde su perspectiva más amplia. Trás el inicio comentado, la historia se retrotrae al pasado para narrarnos todos los hechos que han provocado la muerte aludida.Se plantea en el libor el tema de los matrimonios asimétricos, es decir, aquellos matrimonios buscados o por conveniencia que muestran diferencias muy evidentes entre sus conyuges, ya sean de edad, geográficas, educativas o culturales, y que en principio suponen un posible contratiempo para que se desarrolle con normalidad.Como elementos atrayentes de esta novela, además de su atractiva trama, hay que considerar sobretodo la cuidada forma de su lenguaje: abundan los adjetivos, utiliza expresiones bien elaboradas y literarias, descripciones muy concretas...es decir no sólo puede resultar entretenida sino que también está bien presentada. Con todo lo expuesto consideramos que merece la pena acercarse a esta lectura, escrita hace unos años y con un difusión limitada que ha hecho que no haya sido muy leída, pero que tiene ingredientes suficientes para entretener al lector.

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El Tesoro es un libro que tendrá un público fiel entre aquellos que desayunan un café mirando el reloj antes de la salida del sol; entre los que desgastan las suelas pateando aceras; entre los que almuerzan con clarete y mantel a cuadros. Aquellos que busquen asesinos, conspiraciones internacionales y complots sectarios, deberán esperar otra oportunidad. Jiménez-Ocaña no necesita grandes tramas para demostrar que es un escritor sólido, con oficio. Un escritor que sabe qué se trae entre manos.La historia se sitúa en los primeros años de la década de los ochenta y arranca con un joven albañil que decide dejar su trabajo para convertirse en escritor. Tal vez, estas primeras páginas resulten algo lentas al lector, trasmitiendo la sensación de un motor frío que necesita arrancar. En ellas, parece que el narrador en primera persona tarda demasiado tiempo excusando su decisión.La sensación de asistir a un calentamiento se consolida en cuanto la historia entra en su trama central, cuando el joven se independiza y comienza a vivir con unos amigos. Aquí tanto la imaginación -o la memoria - como el arte de Jiménez-Ocaña sale a relucir con una narración fluida, sobria, efectiva, que, desde una ironía muy saludable, nos relata las anécdotas cotidianas del protagonista. Aquí se relata el asfalto infinito de la ciudad, el frío de las habitaciones de estudiantes, el sexo urgente… Pero sobre todo se relata el amor a la literatura, la lucha por una frase correcta en el inicio, el ansia que destruye los tejidos cuando no salen las palabras adecuadas. Otro de los aciertos de autor es la descripción de la iniciación del protagonista en la venta ambulante de libros. Es difícil no compartir la sensación de amenaza que trasmiten los habitantes de ese mundo de vendedores, mercachifles, ventajosos y aprovechados. Se comparte tanto como el alivio de una mano amiga, de la aparición los camaradas de guerra que siempre otorga la vida. El libro queda dividido claramente en dos partes con la aparición del personaje Natalio Viñas

La gente de Serena dice que Simón es un bicho raro. Piensan que está un poco loco, y tal vez no les falte razón, pues él no es como los demás muchachos. Prefiere la soledad y disfrutar de su trabajo de enterrador. Además, Simón tiene un secreto: está enamorado de la Marquesita, sobrina de los terratenientes del lugar. Pero hay algo que ignora. Como ocurre con la vida de algunas personas, la suya también está marcada por la tragedia.En el marco de la España de posguerra, en una España rural azotada por el hambre y las epidemias, asistimos a una historia que arranca como un cuadro costumbrista y se resuelve en la más pura tradición de la novela gótica. En un alarde de imaginación y destreza narrativa el autor trenza recuerdos de su propia infancia con relatos de aparecidos que regresan de la tumba, todo ello sobre un fondo social de un realismo sobrecogedor.La dama de medianoche es un relato de amor y de muerte, de abnegación y sufrimiento, de terror y esperanza. Una originalísima novela en la que se mezclan lo vivido y lo soñado, y donde el lector hallará sin la menor duda páginas repletas de emoción y suspense.

"¿Qué busca con "En algún lugar del camino"-Pretendo insuflar de nuevo el idealismo, la utopía, el romanticismo revolucionario, la lucha, el compromiso de aquellos años del final de la dictadura y comienzo de la democracia, porque pienso que se han perdido algo. Es una novela que va dirigida a los jóvenes de ahora para que conozcan a los de antes.Con una visión anarquista..."Fernando Jiménez Ocaña para andaluciainformacion.es.

"En la actualidad y siempre, los cafés son lugares de encuentro, intercambio y tránsito vital en los que convergen biografías y vivencias. Este libro se centra en nueve cafés míticos de Zara

En 1977, un joven albañil viaja desde España a un monasterio franciscano situado en los Apeninos para colaborar en su reconstrucción. No podía imaginarse lo que allí iba a encontrar, ni los personajes inquietantes y extraordinarios que conocería. Porque aquello era sólo el comienzo de una aventura que lo llevaría a descubrir la cultura y convertirse en escritor. Este es un libro de viajes, pero también la narración de un encuentro con el mundo, de un viaje interior que cambia la vida del protagonista. Un libro, en suma, que te lleva en volandas por lugares sorprendentes, en los que el lector se siente un viajero más.

La colina de los sueños es, sin duda,una de las narraciones más apasionantes y sinceras de Arthur Machen. Es tambien,a juicio de los críticos,una de las más brillantes de su producción. Publicada en 1904 con el titulo de The Garden of Avallaunius, y con su titulo definitivo en 1907, Machen la habia escrito, sin embargo, entre 1895 y 1897, en un empeño angustioso por explorar una region espiritual poblada de zonas oscuras y por encontrar un estilo diferente, quiza movido por algun soplo de los vientos simbolistas que en esos años recorren las letras francesas: "Quiero escribir la historia de un Robinson Crusoe del alma, de un hombre que esta solo, no porque se halle en una isla desierta sino por su aislamiento mental, porque entre el y todos aquellos con quienes tropieza media un abismo." Pero el resultado de su experimento es mucho mas complejo. Nos enfrentamos aqui con un libro escrito en un lenguaje cuyas imagenes -unas veces recurrentes "como en una sinfonia", otras aparentemente inconexas, pero dotadas de misteriosas correspondencias en el plano sensible y en el de la pura idea- aspiran a sugerir de manera sutil algo que el lector debe adivinar. Porque, como los viejos textos esotericos, La colina de los sueños tiene mas de una lectura.

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