El libro es un análisis del pluralismo en varias dimensiones históricas, ideológicas, constitucionales y jurídicas. Comienza por un estudio de la formación de! concepto de memoria colectiva y su difícil nexo con la sociedad plural de nuestro tiempo. Aborda las raices y proyecciones del pluralismo actual, que el autor encuentra en el relativismo axiologico, en Kant y en el neokantismo, por lo que presta una especial atencion a Kelsen, Radbruch, Stammler, Arnold Brecht y otros, debido a su critica hacia las verdades absolutas y a su propuesta democratica de relacion bien entendida entre mayorias y minorias. Pero un autor domina sobre todos en este libro: y es Pierre-Joseph Proudhon. Al que Norberto Bobbio ubica como el principal valedor teorico del pluralismo, pero cuya criba se puede asociar tambien, y asi se hace, con la critica a la participacion democratica de nuestros sistemas (sus frustraciones, deficiencias electorales, etc.). que igualmente es plausible relacionar con algunos de los problemas planteados por los movimientos de los llamados "indignados" y su contestacion democratica. No hay que olvidar que la desafeccion hacia el sistema parlamentario ya habia nacido, y no sin razones, en tiempo de Proudhon.
El libro es un análisis del pluralismo en varias dimensiones históricas, ideológicas, constitucionales y jurídicas. Comienza por un estudio de Ta formación de! concepto de memoria colectiva y su difícil nexo con la sociedad plural de nuestro tiempo. Aborda las raices y proyecciones del pluralismo actual, que el autor encuentra en el relativismo axiologico, en Kant y en el neokantismo, por lo que presta una especial atencion a Kelsen, Radbruch, Stammler, Arnold Brecht y otros, debido a su critica hacia las verdades absolutas y a su propuesta democratica de relacion bien entendida entre mayorias y minorias. Pero un autor domina sobre todos en este libro: y es Pierre-Joseph Proudhon. Al que Norberto Bobbio ubica como el principal valedor teorico del pluralismo, pero cuya criba se puede asociar tambien, y asi se hace, con la critica a la participacion democratica de nuestros sistemas (sus frustraciones, deficiencias electorales, etc.). que igualmente es plausible relacionar con algunos de los problemas planteados por los movimientos de los llamados "indignados" y su contestacion democratica. No hay que olvidar que la desafeccion hacia el sistema parlamentario ya habia nacido, y no sin razones, en tiempo de Proudhon.