JESUS MUÑOZ ROMERO

Ahora que salimos cegados de este confinamiento y contemplamos la ruina de nuestras cosas, necesitaremos filósofos que nos guíen, ingenios que construyan y poetas que canten. Yo soy zafio con mis manos y no soy pastor, pero dibujo palabras

Selección de 100 coautores que encontraron en la escritura un alivio y cura en estos momentos difíciles

El Quijote es la Biblia del ser hispánico, de la heroica soledad puesta al servicio del todo para conquistar la nada y de la desordenada codicia de los bienes ajenos, por tanto, de la nobleza de nuestros instintos y del hambre.Desde otra perspectiva, el Quijote es el puerto de los investigadores de la extension del aire. Existen miles y miles de estudios sobre su texto y ninguno fue a dar hasta este librito con una de sus claves, tal vez la mas esencial: fijar exactamente en el tiempo su fabula y compararla con un hecho historico. Esto abre una nueva dimension de incalculable valor para la comprension del libro.Y por si fuera poco, tambien sirve atodos aquellos exploradores modernos que pretenden seguir la ruta de Don Quijote como Dios manda, pues se declara el punto de partida, aquel del que no quiso acordarse.

A menudo el tráfago de los trabajos y los días no nos permite detenernos a comtemplar las maravillas que se muestran enn cualquier parte. Para ser poeta no hace falta domeñar el pincel o la pluma, basta con ser sensible a la belleza. En este libro, el autor propone un recorrido por diez esculturas del casco historico de Toledo. Tiene la particularidad de que no hace una siemple descripciona rtistica, sino que en un lenguaje smeiliterario tambien evoca sensaciones que le producen la contemplacion de las obras. A esto hay que añadir la aportacion definitiva de los diez artistas, todos vivos y activos, que conocen mejor que nadie la intrahistoria de sus creaciones.