Joseph McBride

Esta es la primera biografía crítica exhaustiva que ofrece un complejo y fascinante retrato de un hombre y un artista inquieto y conflictivo...McBride relaciona con elegancia y convicción la vida personal de Ford con su carrera...McBride ha escrito una excelente y largamente esperada biografía de un artista americano fundamental.

John Ford, autor de más de cien películas a lo largo de su vida, es uno de los pioneros y, probablemente, uno de los cineastas más importantes de la historia del cine. La sencillez y la sensibilidad aplicada a sus films fueron sin duda los elementos base de sus historias, narradas sobre las grandes gestas, sobre la leyenda o, simplemente, sobre el ser humano.Joseph McBride y Michael Wilmington, dos de los más importantes críticos del mundo anglosajón, han compuesto este libro a través de algunas películas de Ford que tocaban los temas más esenciales de su filmografía. El libro está unánimemente considerado como el mejor trabajo sobre Ford que se haya escrito hasta la fecha

Hollywood no ha dado un director más grande que John Ford. Entre 1917 y 1970, Ford dirigió y/o produjo más de 226 películas, desde discretos cortometrajes hasta ambiciosas epopeyas e intensos documentales de combate. Sus principales trabajos, -tales como "La Diligencia" ("Stagecoach"), "Las Uvas de la Ira" ("The Grapes of Wrath"), "Qué verde era mi valle" ("How Green Was My Valley"), "They Were Expendable", "El Hombre Tranquilo" ("The Quiet Man"), "Centauros del Desierto" ("The Searchers") y "El Hombre que Mató a Liberty Valance" ("The Man Who Shot Liberty Valance")- son clásicos del cine. Las películas de Ford sobre la historia americana son investigaciones profundas del carácter nacional. A lo largo de su larga y prolífica carrera, Ford se popularizó por redefinir el género Western, enmarcando historias de vidas pionera frente al eterno telón de Monument Valley. Las películas de Ford consiguieron admiración en el mundo entero. Sin embargo, Ford fue un hombre atormentado y deliberadamente enigmático. Ocultó su verdadera personalidad al público, presentándose más como un escritorzuelo analfabeto que como el artista sensible que sus películas mostraban que era. Guió sagazmente las carreras de algunas de las más grandes estrellas de Hollywood, como John Wayne, Henry Fonda, James Stewart, Maureen O'Hara y Katharine Hepburn, aunque su trato hacia los actores pudiera ser abusivo e incluso sádico. Al comienzo de su vida estuvo impregnado por políticas progresistas e independentistas irlandesas, para terminar convertido en un estricto republicano y contralmirante de la Marina estadounidense; recibió el reconocimiento de Richard Nixon por la creación de películas que ensalzaban los "viejos valores" del heroísmo, del deber y del patriotismo. Sobre Ford se ha escrito enrevesadamente con el fin de reconciliar la desalentadora paradoja entre

La magnífica biografía de Joseph McBride, publicada en Norteamérica después de una gestación de treinta años, ofrece el mejor análisis hasta la fecha de un hombre cuya fachada de brusco, tirano sádico y alcoholico ocultaba un interior sensible y sentimental. En sus casi de ochocientas pa ginas, el autor pinta un fascinante y documentado retrato de un artista profundamente contradictorio que solo era feliz cuando dirigia. A traves de mas de un centenar de entrevistas con familiares, amigos y con el propio protagonista, McBride teje elegantemente detalles de la muy automitificada vida personal de Ford un matrimonio discolo, filiaciones politicas y un posible affaire con Katharine Hepburn con iluminadoras evaluaciones de sus peliculas.El libro de Joseph Mc Bride tiene la extension, la pasion, la complejidad y la tragica grandeza de una pelicula de John Ford. Minuciosamente detallado y documentado, el li bro de McBride llena todos los vacios y nos brinda al personaje al completo: se ntimental pero cruel, brillante aunque fingiendo ser siempre un inculto, po li ticamente liberal en un momento dado y conservador al siguiente. En ultima instancia, McBride nos demuestra que este artista que se resistia a escuchar la palabra arte solo podia expresarse por completo y con honestidad a traves de sus peliculas.Para todos los que crecimos con esas peliculas, es te li bro es un tesoro y una gratisima sorpresa. Los jovenes que desconocen la obra del cineasta, que aun no han podido apreciar la imperecedera belleza de sus grandes peliculas, deberian leer Tras la pista de John Ford de forma compul siva.MARTIN SCORSESE