MANUEL JESUS ROMERO BRAVO

La estimulación cognitiva se ha mostrado como un complemento terapéutico sumamente eficaz de la terapia farmacológica. Ambas vías de intervención combinadas producen un amplio rango de beneficios en las funciones cognitivas del paciente, su capacidad de ejecución, estado de ánimo y autonomía. Se consigue de esta forma una mejora en la calidad de vida de la persona enfermo e, indirectamente, de su entorno.

Desde las presentes páginas se ofrece una aproximación a la teoría de la enfermedad para facilitar el conocimiento de los rasgos más significativos de la misma. Pero, sobre todo, se ofrece una aproximación teórica y práctica al tratamiento basado en la estimulación cognitiva, el cual aprovecha la facultad de aprendizaje aún existente en enfermos de Alzheimer en fase leve y moderada, potencia, mediante la práctica, capacidades residuales de cálculo, praxis, lenguaje, reconocimiento, orientación, atención y, por supuesto, memoria. La estimulación cognitiva se ha mostrado como un complemento terapéutico sumamente eficaz de la terapia farmacológica. Ambas vías de intervención combinadas producen un amplio rango de beneficios en las funciones cognitivas del paciente, su capacidad de ejecución,