Sin ignorar las circunstancias sociales que producen los movimientos extremistas, este estudio considera seriamente los elementos religiosos del fundamentalismo, particularmente del islámico y del cristiano. Explica por que algunas religiones son mas proclives que otras a producir movimientos fundamentalistas y por que estos difieren en su predisposicion a servirse de la violencia para alcanzar sus objetivos. Por otra parte, Steve Bruce sostiene que el fundamentalismo es una respuesta racional de pueblos tradicionalmente religiosos a los cambios sociales, politicos y economicos que reducen el papel de la religion en la vida publica, y que, a pesar de su importancia como sintoma de estos cambios, no presenta un desafio serio o una alternativa sostenible a la democracia liberal y secular de la mayoria de las sociedades occidentales.