Una obra inclasificable, de una belleza hipnótica. A mitad de camino entre el dietario íntimo y la crónica cultural, Alfabeto ruso se convierte en una fascinante enciclopedia afectiva del lenguaje y nos muestra cómo es vivir y soñar dentro de un idioma ajeno. Por sus páginas desfilan Chéjov, Tolstoi, Dostoievski, Nabokov, Svestaieva Con una prosa inteligente y luminosa, Marina Berri nos descubre la Rusia literaria y también la cotidiana, la de los grandes autores y la que está más allá de los noticiarios.