AVENTURAS Y DESVENTURAS DE UN ENFERMO EN AGOSTO

El autor describe sus vivencias personales de enfermedades que, tanto en 2020, como en 2016, le sobrevinieron en agosto. Localizar en agosto un cardiólogo en Barcelona, aún en las mejores clínicas, puede convertirse en el juego de los mil disparates. En su cáustica versión, el Laboratorio de analíticas puede llegar a parecer un banco de sangre. Luego, la recepción da citas con cardiólogos que están de vacaciones. Luego aparece el cardiólogo que no es cardiólogo. El proceso se alarga. Finalmente, el paciente a mediodía emprende la huida del hospital porque llega tarde a una cita y se encuentra en el parking el coche desvalijado. El guardián de la cabina de control del parking le dice que vuelva el próximo mes que ya estarán los jefes. A pesar de la demora, comida apacible entre padre e hijo. Por la tarde, de nuevo a Urgencias. El cardiólogo suplente de Urgencias con poca experiencia se sacude el paciente como puede.