Hoy en día la figura del poeta intelectual no existe, Octavio Paz fue el último. En su vida y obra siempre reivindicó la función del escritor como poder alterno. Los intelectuales, dijo, «[no] podemos renegar de la política; sería peor que escupir contra el cielo: escupir contra nosotros mismos». Los fragmentos que forman Corriente alterna apuntan hacia un tema único: la aparición en nuestra historia de otro tiempo y otro espacio: «todo es presencia, todos los siglos son este presente». Al releer estos textos es difícil imaginar que fueron escritos hace unos cuarenta años; su relevancia e interés hoy son indiscutibles.
Así, «la clase universal, el proletariado, sigue siendo presa del reformismo y del nacionalismo»; «el gran problema al que se enfrentarán las sociedades industriales […] es el del ocio»; «es explicable la tentación de enterrar al marxismo. Nada más difícil »; «sólo una asociación [de los países latinoamericanos] libre de toda influencia no latinoamericana puede preservarnos» son sólo algunos ejemplos de la vigencia de su voz.
Ficha técnica
Editorial: Siglo Xxi
ISBN: 9788432313899
Idioma: Castellano
Número de páginas: 224
Tiempo de lectura:
5h 17m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 04/11/2009
Año de edición: 2009
Plaza de edición: Madrid
Alto: 22.5 cm
Ancho: 14.5 cm
Peso: 300.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Octavio Paz
Octavio Paz (México 1914-1998) inició su actividad literaria a muy temprana edad, colaborando en revistas culturales y diarios a partir de 1932. Tras fundar en Yucatán en 1936 una escuela para hijos de campesinos, viajó a España y Francia (1937 y 1938). En España asistió al Segundo Congreso Internacional de Escritores en defensa de la Cultura. Trabajó como periodista en México de 1938 a 1944, año en el que se trasladó a Estados Unidos como becario de la Fundación Guggenhein para ingresar, poco después, en el servicio diplomático mexicano, que le llevó a destinos como París, Tokio y Nueva Delhi. Nombrado embajador de México en Nueva Delhi en 1962, dimitió de su cargo en 1968 como protesta por la matanza de la Plaza de Tlatelolco. Después de varios viajes y estancias en Estados Unidos y en Inglaterra, se afincó de nuevo en México, donde fundó en 1971 la revista Plural, suplemento literario del diario Excelsior, que abandonó en 1976 para fundar la revista Vuelta.