Sinopsis de DE REYES Y DENTISTAS: LA ODONTOLOGIA Y LA CASA REAL ESPAÑOLA. DE CARLOS V A FELIPE VI
Una visión insólita sobre la humana circunstancia de los Reyes españoles: la que vivieron en manos de sus dentistas.Como cada cual, también los Reyes pertenecieron a la humanidad doliente. Y quien no hubiera caído en la cuenta, que abra este libro y se pasee por la vida cotidiana de Austrias y Borbones, hasta la fecha. Verá que los males de la boca no respetaron categorías humanas y todos acabaron pasando, antes o después, por las manos del dentista. Cosa diferente fueron las artes de quienes fueron contratados por la Casa Real para dar alivio dental a sus titulares. Aquí sí que hubo categorías, desde los sacamuelas denostados por Quevedo hasta los dentistas formados a finales del XIX en los mejores centros de los Estados Unidos, claro que mientras estos últimos fueron excepción, no así los otros. Príncipes y princesas, reyes y reinas, antes o después se vieron en manos de quienes dieron remedio, o al menos lo procuraron, a las agujereadas dentaduras regias, aunque también intentaron hermosearlas y hasta perfumarlas mal que bien. Sin esta minuciosa narración, quizá pareciera la historia de nuestros Reyes y allegados un impenetrable misterio de la torre de marfil. Pero no, es precisamente cuando se averió el regio marfil bucal cuando se humanizó su historia. Javier Sanz (Sigüenza, 1957). Académico de Núme...
Ficha técnica
Editorial: Editorial Renacimiento
ISBN: 9788417950903
Idioma: Castellano
Número de páginas: 220
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 01/07/2020
Año de edición: 2020
Plaza de edición: Sevilla
Colección:
Biblioteca Histórica
Biblioteca Histórica
Número: 39
Alto: 21.0 cm
Ancho: 15.0 cm
Especificaciones del producto
Escrito por Javier Sanz
Javier Sanz es Académico de número de la Real Academia Nacional de Medicina de España, profesor en la Unidad de Historia de la Medicina de la Universidad Complutense de Madrid y autor de unos cuarenta libros. Pero así que pasan los años sigue volviendo la cabeza para recrearse en los días de juventud, cuando lucía el número uno del Club Deportivo Sigüenza, el «Depor», que defendió muchos años. Anotó en blanco y negro, después en color, gestas, usos y costumbres de quienes, como él, volaban para detener aquella badana con diseño de obús. Con la agudeza que permite el telescopio que analiza el planeta fútbol observó a aquellos hombres de una pieza que profesaron los votos como él, aunque en un estadio de cien mil voces, del mejor de los destinos humanos: el de guardameta. Y firmó la columna periodística «La Red» en el semanario deportivo DXT, sobre la circunstancia del arquero, única en el periodismo deportivo hasta la fecha con semejante especificidad.