El billete de un millón de libras es uno de los relatos más divertidos de Mark Twain, lo que le valió ser llevado al cine. Un honrado americano extraviado y arruinado en Londres asiste a bruscos cambios en su fortuna, de la mano de dos excéntricos millonarios. Toda su honradez y sus capacidades son puestas a prueba. Twain nos plantea aquí con su habitual humor e ironía cuestiones como el verdadero valor del dinero, la veneración y la hipocresía que surgen a su alrededor, y el sentido de la honradez, de la amistad y del amor. Las ilustraciones de Marcos Morán enriquecen el relato.
Mark Twain (pseudónimo de Samuel Langhorne Clemens, 1835-1910) es uno de los padres de la literatura de Estados Unidos. Su amplia producción literaria alcanzó gran éxito en su tiempo, el cual se acrecentó con el paso de los años, pues hoy sigue siendo leído en todo el mundo por lectores de todas las edades. De su amplia obra destacan Las aventuras de Tom Sawyer y Las aventuras de Huckleberry Finn.
Ficha técnica
Traductor: Elisabeth Falomir Archambault
Ilustrador: Marcos Morán
Editorial: Gadir
ISBN: 9788494244353
Idioma: Castellano
Número de páginas: 88
Encuadernación: Tapa dura
Fecha de lanzamiento: 07/05/2014
Año de edición: 2014
Plaza de edición: Madrid
Alto: 21.5 cm
Ancho: 14.0 cm
Peso: 318.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Mark Twain
Samuel Langhorne Clemens, más conocido como Mark Twain, nació en la villa de Florida, Misuri, en 1835. Cuando tenía cuatro años de edad, se trasladó con su familia a la localidad de Hannibal, a orillas del Misisipi. A los doce años, empezó a trabajar como aprendiz en el periódico local. Posteriormente, trabajó como impresor en varias ciudades, y se hizo piloto de un barco de vapor. Volvió luego al periodismo, y, en 1876, publicó Las aventuras de Tom Sawyer; en 1883, La vida en el Misisipi y, en 1884, Las aventuras de Huckleberry Finn. Con estas tres obras alcanzaría gran fama en su época. En 1881, escribió El príncipe y el mendigo, que es su primera novela histórica. En 1889, publicó Un yanki en la corte del rey Arturo, y, en 1905, una de sus últimas obras, El forastero misterioso. Gracias a su ingenio y sus sátiras consiguió grandes éxitos como escritor y orador. Falleció en Redding, Connecticut, en 1910.