Al despertar la mañana del 27 de febrero del 2018, tras un sueño intranquilo, Luís Pousa descubre una terrible metamorfosis: ya es mayor que su padre. Ha vivido más años que él. Narrado a corazón abierto—“naturalmente, esto no es una novela, sino la purga de mi corazón remendado”—, a partir de esta descomunal paradoja, que debería estar prohibida por alguna ley de la relatividad general, el autor se lanza, durante treinta y un frenéticos días, a la escritura de "El cielo invisible". Un libro donde confluyen una multitud de géneros literarios y en el que, con una abundante dosis de humor negro, exorciza los fantasmas, el miedo a morir y el recuerdo emocionado de los que ya se han ido.
Ficha técnica
Editorial: Reino de Cordelia
ISBN: 9788418141188
Idioma: Castellano
Número de páginas: 88
Tiempo de lectura:
2h
Encuadernación: Tapa dura
Fecha de lanzamiento: 23/03/2020
Año de edición: 2020
Plaza de edición: Madrid
Número: 13
Alto: 21.0 cm
Ancho: 10.0 cm
Grueso: 0.8 cm
Peso: 100.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Luís Pousa
Luís Pousa (Lugo, 1971) es matemático, escritor y periodista, aunque a estas alturas de su existencia todavía no sabe muy bien en qué orden. Tras su paso por ciudades como Dublín o Barcelona, vive en A Coruña y habita en algún multiverso entre los números transfinitos, la literatura y la crónica callejera. Miembro de la Real Sociedad Matemática Española, es bisnieto de la organización ácrata La Antorcha Galaica del Libre Pensamiento y premio Fernández del Riego de Periodismo. Es autor de obras narrativas como Breviario del bus (2013), de los libros de poesía El ombligo del mar (2015) [LOS VERSOS DE CORDELIA, n.º 21] y Poemas para Flash Gordon (2017) [LOS VERSOS DE CORDELIA, n.º 34] y de la tesis matemática El paraíso de Cantor (Universidade de Santiago, 2019). Para no escandalizar a sus allegados, mantiene en secreto su trabajo en las redacciones y cuenta que por las noches se gana la vida practicando el método de Montecarlo en una casa de apuestas. Tiene una gata albina que responde al nombre de Copito, en homenaje al difunto gorila Floquet de Neu, con el que compartió muchas tardes ociosas en el Zoo de Barcelona.