Finales del siglo octavo. El obispo Eterio recibe en Osma la visita de un mensajero que anuncia la muerte de Beato de Liébana. Deseoso de saber más sobre su maestro, Eterio envía al valle cántabro al diácono Siricio con la orden de que vea, indague y escriba cómo fueron los últimos años del abad lebaniego. Su informe no sólo habla de los días del monje, también recoge la historia de la comunidad monacal y una serie de intrigas que desembocan en la misteriosa muerte de una joven.
Años centrales del siglo XVIII, Valcavadillo, Palencia. El párroco Simplicio halla, entre las ruinas del desaparecido monasterio de Valcavado, un manuscrito que contiene una confesión, entreverada de unas notas de viaje y de un Comentario al Cantar de los cantares. Sus protagonistas, los mismos que diez siglos antes presentara Siricio en su comunicado a Eterio. Como si de círculos concéntricos se tratara, los dos relatos se complementan y cierran todos los resquicios de una historia de amor, escrita con un lenguaje de elevado erotismo, repleto de reminiscencias bíblicas y cervantinas. Al fondo el siglo octavo, luchas de fe, Beato de Liébana, Elipando, Alcuino de York, Angilberto o Carlomagno, y un amplio itinerario que abarca desde Liébana hasta Roma, pasando por Burdeos, Tours, Céntula y Aquisgrán.
Esta obra de Emilio Pascual —autor galardonado con el Premio Lazarillo de novela y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil— sorprende por la elevada calidad de su prosa y colmará las medidas de todo buen lector.
Ficha técnica
Editorial: Valnera
ISBN: 9788493681340
Idioma: Castellano
Número de páginas: 270
Tiempo de lectura:
6h 24m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 02/12/2010
Plaza de edición: Cantabria
Especificaciones del producto
Escrito por Emilio Pascual
Emilio Pascual (Tejares, Segovia, 1948) estudió Filología Hispánica en la Complutense de Madrid. Su vocación de profesor se vio permanentemente pospuesta por las aventuras editoriales en Anaya y en Cátedra. En 1999 obtuvo el Premio Lazarillo por Días de Reyes Magos, que se vio corroborado al año siguiente con el Nacional de Literatura Infantil y Juvenil. Una docena de libros, entre los que cabría recordar El fantasma anidó bajo el alero, Apócrifos del Libro y El número de la Bella, han dejado testimonio de su fervor por la lectura.