La emoción más fuerte y antigua de la humanidad es el miedo, y el más intenso y antiguo tipo de miedo es el miedo a lo desconocido. Quienes leen sin placer a Lovecraft (sobre todo en algunas de sus obras como "En las montañas de la locura" o "El que susurraba en las tinieblas") no conocen el grado superlativo del miedo, esa angustia que podríamos denominar, en buen romance, el pavor, y que a él mismo le gustaba llamar "horror cósmico", no sin grandilocuencia. Se trata del miedo a la existencia en general, al universo en tanto lugar extraño y hostil.La emoción más fuerte y antigua de la humanidad es el miedo, y el más intenso y antiguo tipo de miedo es el miedo a lo desconocido. Quienes leen sin placer a Lovecraft (sobre todo en algunas de sus obras como "En las montañas de la locura" o "El que susurraba en las tinieblas") no conocen el grado superlativo del miedo, esa angustia que podríamos denominar, en buen romance, el pavor, y que a él mismo le gustaba llamar "horror cósmico", no sin grandilocuencia. Se trata del miedo a la existencia en general, al universo en tanto lugar extraño y hostil.
Ficha técnica
Editorial: Prometeo Libros
ISBN: 9789875746220
Idioma: Castellano
Número de páginas: 158
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 25/11/2014
Año de edición: 2014
Plaza de edición: Argentina
Peso: 230.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por H.P. Lovecraft
Nació en 1890 en Providence, Rhode Island. Hijo único, su padre murió cuando tenía ocho años, por lo que su educación recayó principalmente en su madre y su abuelo materno. Debido a su delicada salud, fue poco a la escuela y se convirtió en un joven solitario dedicado a la lectura, a la astronomía y a escribir. Trabajó ocasionalmente escribiendo cuentos para periódicos y revistas, y se relacionó, principalmente por carta, con un grupo amplio de escritores de la época. Se casó en 1924, pero su matrimonio duró apenas dos años. Su situación económica fue cada vez más precaria. Murió en 1937 sin que su obra tuviera gran repercusión. Sus relatos y novelas adquirieron la relevancia que tienen hoy en día años después de su muerte. Se le considera un gran impulsor del cuento de terror.