Poco aficionado al trabajo, a Rip van Winkle lo que de verdad le apasiona es pasear por el bosque, cazar ardillas, conversar y narrarles cuentos a los niños, jugar con su fiel perro Wolf, salir de pesca, hacerles favores a las mujeres del pueblo y juntarse con sus amigotes en la posada para contarse historias de nada y comentar las noticias que llegan a esa apacible colonia holandesa a orillas del río Hudson. Pero por estas aficiones su esposa regaña continuamente a nuestro atribulado Rip. En uno de sus paseos por el bosque se encuentra con un extraño personaje que le pide ayuda para trasladar un barril hasta donde están sus compañeros, unos seres igualmente extraños que juegan a los bolos. Bebe del licor que le ofrecen hasta que se duerme y cuando despierta la sensación de irrealidad se apodera de él ya que todo ha cambiado de manera radical: su mosquete está enmohecido, su perro desaparecido, por la cañada por la que antes caminaba ahora corre un torrentoso río. Tras imprecar contra "áese maldito jarro!" con el que cayó dormido emprende el camino de regreso con una preocupación mayúscula: "¿Qué disculpas voy a dar a la señora Van Winkle?". Sin embargo, para Rip van Winkle va a comenzar una aventura que ni imagina, En Rip van Winkle Washington Irving recrea de maner
Ficha técnica
Editorial: Tres Puntos Ediciones
ISBN: 9788417348977
Idioma: Castellano
Número de páginas: 124
Tiempo de lectura:
2h 52m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 07/12/2021
Año de edición: 2021
Plaza de edición: Madrid
Grueso: 0.8 cm
Peso: 220.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Washington Irving
Nació en Nueva York, el 30 de abril de 1783. Realizó estudios de Derecho, pero su vocación se interesaba más por el periodismo y la escritura que por la abogacía. En 1802 comenzó a escribir artículos en periódicos de Nueva York. En 1815 se fue a vivir a Liverpool y allí trabó amistad con importantes hombres de letras: sir Walter Scott y Thomas Moore, entre otros. Escribió algunos ensayos y relatos bajo el seudónimo de Geoffrey Crayon. En Madrid perteneció al cuerpo diplomático de su país. Nuevamente en Estados Unidos en 1846, regresó a Sunnyside, su casa de campo, y allí falleció el 28 de noviembre de 1859.