Inspirada en un suceso real, "Robinson Crusoe" se convirtió desde el mismo momento de su publicación en un éxito de público. Clásico de aventuras por excelencia, la novela narra el naufragio de un marinero que, único superviviente, se ve arrojado a una isla desierta. Allí, con la sola ayuda de su capacidad y de su ingenio habrá de enfrentarse a la naturaleza, a la soledad y a los peligros que acechan en las islas vecinas.Inspirada en un suceso real, "Robinson Crusoe" se convirtió desde el mismo momento de su publicación en un éxito de público. Clásico de aventuras por excelencia, la novela narra el naufragio de un marinero que, único superviviente, se ve arrojado a una isla desierta. Allí, con la sola ayuda de su capacidad y de su ingenio habrá de enfrentarse a la naturaleza, a la soledad y a los peligros que acechan en las islas vecinas.
Ficha técnica
Traductor: Martha Eguía
Ilustrador: J. J. Grandville
Editorial: Alianza Editorial
ISBN: 9788491043218
Idioma: Castellano
Número de páginas: 416
Tiempo de lectura:
9h 55m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 17/03/2016
Año de edición: 2016
Plaza de edición: Es
Colección:
Alianza 13/20
Alianza 13/20
Alto: 20.0 cm
Ancho: 13.0 cm
Grueso: 3.0 cm
Peso: 308.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Daniel Defoe
Daniel Defoe nació en Londres en 1660. Empezó a estudiar para convertirse en sacerdote presbiteriano, pero decidió abandonar el camino eclesiástico para dedicarse al comercio. Se convirtió rápidamente en un hombre de negocios, y gracias a su trabajo viajó por países de Europa, como España, Francia o Alemania.
Defoe compaginaba su carrera comercial con el activismo político: a partir del año 1702, empezó a publicar ensayos y panfletos satíricos en contra del gobierno. Sus punzantes críticas acabaron teniendo consecuencias, y Defoe ingresó en prisión en el año 1703.
En 1719, ya en libertad, publicó Robinson Crusoe, su gran novela. A partir de ese momento, empezó a colaborar en prensa y trabajó de cerca con los gobiernos de Guillermo III y Jorge I. Pese a todo, nunca logró reponerse de la bancarrota que le ocasionaron sus negocios, y seguía huyendo de sus acreedores cuando murió en 1731.