Sinopsis de SOBRE LA HISTORIA NATURAL DE LA DESTRUCCION
Durante la Segunda Guerra Mundial, 131 ciudades y pueblos alemanes fueron tomados como objetivo de las bombas de los Aliados, y buen número de ellos resultaron arrasados casi por completo. A consecuencia de esos bombardeos murieron seiscientos mil civiles alemanes: una cifra que duplica el número de las bajas de guerra sufridas en conjunto por los americanos. Siete millones y medio de alemanes quedaron sin hogar. Dado el asombroso alcance de la devastación, el autor se hace una pregunta: ¿porqué este tema ocupa tan escaso espacio en la memoria cultural de Alemania? En Sobre la historia natural de la destrucción, Sebald investiga a fondo este ominoso silencio. Examina viejas y piadosas interpretaciones y las sustituye por incómodas, pero necesarias, verdades. Da respuesta a las preguntas cruciales que se plantean cuando las comunidades deben sanar de las heridas que se han autoinfligido, entre las que estaca el gran interrogante sobre quiénes tienen derecho a atribuirse el papel de víctima. W. G. Sebald (1944-2001), entre sus galardones figuran el premio Joseph Breitbach, el Heinrich Heine y el Independent Foreign Fiction por Austerlitz, publicado por Anagrama, al igual que Sobre la historia natural de la destrucción, Del natural, Pútrida patria, Los emigrados, Campo Santo, Los anillos de Saturno y Vértigo.
Ficha técnica
Editorial: Quinteto
ISBN: 9788497111201
Idioma: Castellano
Número de páginas: 160
Tiempo de lectura:
3h 44m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 10/02/2010
Año de edición: 2010
Plaza de edición: Barcelona
Especificaciones del producto
Escrito por W.G. Sebald
(1944-2001) Su nombre completo era Winfried Georg Sebald. Con 26 años llegó a Norwich (Inglaterra) para dar clases en la Universidad de East Anglia y dónde, desde 1987, ocupó la cátedra de literatura europea. Fue fundador del prestigioso British Centre for Literary Translation, del que fue director hasta 1994. Escritor tardío, su primera novela Vértigo (1990), la escribió cuando contaba 46 años, fijó las formas y los territorios de una narrativa que en sólo diez años y otros tres libros, Los emigrados (1996), Los anillos de Saturno (2000) y Austerlitz (2002), le convirtieron en autor de culto.