Prólogo de Jorge Wagensberg.Aunque ya casi nadie duda de que la biología sexual humana es tan distintiva de nuestra especie como la postura bípeda o el cerebro voluminoso, desde una perspectiva no antropocéntrica la sexualidad humana se revela como un auténtico rompecabezas evolutivo. Para el biólogo, las singularidades anatómicas, fisiológicas y comportamentales de nuestra sexualidad constituyen un fenómeno sin parangón en el resto del reino animal que suscita muchos interrogantes: ¿por qué es tan manifiesta la diferencia entre las anatomías masculina y femenina?, ¿por qué se ha emancipado nuestra actividad sexual del ciclo menstrual?, ¿por qué las mujeres experimentan orgasmos comparables a los masculinos?, ¿cómo y por qué han evolucionado nuestros criterios de belleza?, ¿es la homosexualidad innata o adquirida?, ¿es natural la agresión sexual o constituye una perversión cultural?En la conjura de los machos, el biólogo ambrosio garcía leal consigue ensamblar las piezas de este rompecabezas y explicar la singular naturaleza de la sexualidad humana en el marco de nuestro pasado evolutivo. De este modo, los mecanismos de la selección natural y la biología arrojan una nueva luz sobre aspectos cruciales de la conducta humana: desde la monogamia hasta la promiscuidad, desde el enamoramiento hasta la violación, desde el cuidado de los hijos hasta la pornografía.
En El azar creador, Ambrosio García Leal afronta decisivas cuestiones relativas al progreso evolutivo y para ello aporta la noción de «bomba de complejidad»; ésta promueve la plasticidad fenotípica y permite comprender por qué, a pesar de todo, los organismos parecen alejarse cada vez más de la complejidad mínima y cómo consiguen enfrentarse de modo eficaz a entornos impredecibles. Asimismo, introduce una nueva concepción de la individualidad darwiniana, compatible con la integración de los individuos en asociaciones cooperativas susceptibles de ser favorecidas por la selección natural. A la hora de independizarse de la incertidumbre ambiental, el sexo y la capacidad de aprender desempeñan, según el autor, un papel fundamental.
Los biólogos siempre han sabido que, como procedimiento reproductivo, el sexo parece una complicación innecesaria. ¿Por qué perder el tiempo en encontrar una pareja aceptable que, a su vez, lo encuentre aceptable a uno o una? En teoria, debido a este y otros costes añadidos de la reproduccion sexual, la seleccion natural deberia apostar por la alternativa asexual, mas rentable a corto plazo. Sin embargo, en el mundo vivo encontramos sexo por doquier: es la modalidad reproductiva mayoritaria en animales, plantas, hongos y muchas otras formas de vida, por lo que cabe preguntarse cual es la ventaja del sexo sobre la clonacion asexual. No es extraño que, para los biologos, el sexo sea el problema de los problemas evolutivos.Garcia Leal, despues de examinar todas las propuestas de solucion del problema, expone la suya propia, basada en el principio de independencia de la incertidumbre del entorno, es decir, en la necesidad de adaptarse a un entorno impredecible. Ademas plantea otro problema evolutivo: la existencia de sexos diferenciados. En principio, nada impide que las especies sexuales esten constituidas por hermafroditas, pero en el mundo vivo el hermafroditismo es la excepcion. La existencia de sexos, y en particular de dos sexos, es tan enigmatica como el sexo mismo. ¿Por que hay machos y hembras? Sobre esta y otras muchas cuestiones arroja luz El sexo de las lagartijas.