Antonio Jesús Alonso Timón

El urbanismo se encuentra en una difícil encrucijada en nuestro país en el momento actual. La deriva de la economía en los últimos años ha supuesto su injusta demonización. Focos son los que ahora se acuerdan de los importantes servicios pres­tados por esta materia durante muchos años y del importante papel que ha cumplido en el proceso de transformación y modernización de nuestro país. Muchos son los que ahora olvidan que el urbanismo nunca fue el pro­blema, síno parte de la solución. Pero, claro, es obvio que cuando el urbanismo se desna­turaliza, se utiliza para f ines distintos a los que viene llamado a cumplir y se hace recaer sobre él el peso de cuestiones que poco o nada tienen que ver con su naturaleza, se produce un colapso de extraordinarias con­secuencias, como hemos tenido la ocasión de comprobar. Otro urbanismo es posible. Otra concepción del mismo es deseable. Y otras importantes misiones está llamada a cumplir esta materia en el futuro, puesto que sin un buen urbanis­mo no hay paraíso territorial. El objetivo de este libro es acercar el urbanis­mo a aquellas personas que se quieren fami­liarizar con él, dotándoles de una visión sin­tética y de conjunto que les sirva de guía para introducirse en la materia y profundizar en ella en el futuro, en la convicción de que, si aprendemos la lección que nos ha tocado vivir, serán más las satisfacciones que los desencantos que Ies proporcione.

La complejidad del Derecho urbanístico en nuestro país es un hecho que no escapa al común de los mortales. A esta circunstancia ha coadyuvado la proliferación de legislaciones autonómicas tras la decisiva Sentencia del Tribunal Constitucional 61/1997, de 20 de marzo. No obstante, con independencia de las peculiaridades propias de cada legislación autonómica, podemos afirmar que el modelo urbanístico español nacido de la Ley Estatal de Suelo de 1956 y perfeccionado posteriormente en la reforma Legislativa de 1975-1976 sigue estando muy presente en todas esas legislaciones por lo que existen unos cimientos o un tronco común en todas ellas. Ese es precisamente el objetivo de este libro, presentar los pilares de nuestro urbanismo con una explicación clara y sencilla que sirva al lector para iniciarse en este proceloso mundo sin asustarse. El lector podrá deducir que la esencia del Derecho urbanístico gira en torno a tres ámbitos concretos: el planeamiento, la gestión y la disciplina urbanística. Además del análisis de estas tres esferas de urbanismo puro y duro, se analizan los instrumentos a través de los cuales los poderes públicos pueden incidir en el mercado del suelo y se alude a la diferenciación básica y muy actual entre urbanismo y ordenación del territorio.

El urbanismo y la ordenación del territorio son disciplinas comunes en la vocación por la regulación de todas las actividades humanas que se desarrollan en un determinado ámbito, distinguiéndose precisamente por el espacio sobre el que se proyecta cada una de ellas, siendo mas amplio el de la ordenacion del territorio que el del urbanismo. La trascendencia economica de ambas materias es un hecho evidente y tangible, como hemos tenido ocasion de comprobar en nuestro pais en los ultimos años, lo que hace importante la regulacion que de ellas se haga en cada nivel territorial y que dicha regulacion se efectue cada vez mas, en sus principios esenciales o comunes, a nivel global europeo, para ser posteriormente desarrollada y adaptada a nivel interno nacional o regional de manera especifica en atencion a las necesidades de cada territorio. La satisfaccion de esas necesidades humanas proyectadas sobre cada ambito territorial es el objetivo fundamental que incumbe tanto al urbanismo como a la ordenacion territorial y el exito en la consecucion de las mismas dependera de una buena o mala regulacion. A pesar de las convulsiones vividas en relacion con ambas materias en España en los ultimos tiempos, la furibunda demonizacion que de ellas se ha hecho no hace justicia a la labor coadyuvadora que han tenido en el espectacular progreso vivido por este pais en los ultimos veinticinco años.

La regulación del sector eléctrico aparece condicionada tanto por el carácter de servicio esencial que presenta el suministro de electricidad como por una serie de peculiaridades físicas, técnicas y economicas propias de dicho suministro. Al no ser almacenable la energia electrica, las oscilaciones de la demanda de los consumidores deben ser atendidas en tiempo real, siendo precisa una adecuada coordinacion del sistema para que pueda garantizarse el suministro de forma continuada. Asimismo, dicho suministro exige que los productores esten unidos a los consumidores a traves de redes de transporte y distribucion que conforman ver-daderos monopolios naturales. Estos rasgos propios del sector electrico determinaron que el mismo estuviera, desde sus origenes, organizado a partir de empresas verticalmente integradas que desarrollaban las actividades de generacion, transporte y distribucion de energia electrica.Esta estructura tradicional del sector electrico ha ofrecido en ocasiones importantes escollos para la realizacion de una de las politicas europeas mas ambiciosas y conflictivas: el establecimiento en el seno de la Union Europea de un mercado interior de la electricidad y el gas natural. A la consecucion de este objetivo ha obedecido la evolucion del sector electrico español desde los años 90 del pasado siglo hasta el momento actual.La regulacion del sector electrico se enfrenta al dificil reto de armonizar multiples intereses economicos, sociales, medioambientales y politicos, muchas veces contrapuestos entre si. Por este motivo, la actual ordenacion juridica del suministro electrico es notablemente compleja y cambiante, dando lugar a un sector del ordenamiento en el que el denominado riesgo regulatorio y el problema del deficit tarifario cobran un papel protagonista.

Coords., Antonio J. Alonso Timón, Rafael Caballero Sánchez. La transformación del sector ferroviario es un hecho evidente que no tiene vuelta atrás y que, gracias al impulso que a nivel europeo se le ha jado desde principios de los años noventa del siglo pasado, ha mejorado notablemente este medio de transporte en los países de nuestro entorno. El caso español no es una excepción y nuestro país ha vivido un largo y complicado proceso de adaptación a las Directivas comunitarias en la materia que todavía hoy no ha culminado por completo. El resultado es un sector normativo nuevo que pretende dar respuesta a una realidad presidida por la apuesta de la Unión Europea por redes ferroviarias transeuropeas de calidad como medio de transporte sostenible, eficiente e intermodal. El presente libro trae causa de una subvención otorgada por el Ministerio de Fomento a través de la cual se ha conseguido unir teoría y realidad al participar en la confección del mismo Profesores universitarios expertos en el sector ferroviario con miembros del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Entidad Pública Empresarial encargada de la gestión de dichas infraestructuras que cumple un papel de primer orden en todo este proceso.

La obra que ahora se presenta en estos tres volúmenes ha sido elaborada por los profesores de Derecho Administrativo de ICADE-Universidad Pontificia Comillas Madrid. Los cambios ligados a la aparic

La obra que ahora se presenta en estos tres volúmenes ha sido elaborada por los profesores de Derecho Administrativo de ICADE-Universidad Pontificia Comillas Madrid. Los cambios ligados a la aparic

La obra que ahora se presenta en estos tres volúmenes ha sido elaborada por los profesores de Derecho Administrativo de ICADE-Universidad Pontificia Comillas Madrid. Los cambios ligados a la aparic