Espero, amable, o tal vez paciente/curioso/intranquilo lector, que no tomes ligeramente esta visión de nuestra España, una grande, malentendida y vilipendiada nación. Vilipendiada por los de fuera, por su grandeza, y por los de dentro por sus complejos, su falta de analisis y su desconocimiento de lo que ha hecho a España unica en Europa y en el mundo por muchos siglos. Su grandeza la comprenderas si sabes leer la historia y darte cuenta de que esa leyenda negra que en Europa nos han tejido es precisamente la reaccion de nuestros enemigos a eso: su grandeza historica que, al no poder negarla, ni ignorarla, la han querido cubrir de lodo, de prejuicio, de incomprension, negando evidencias y no contrastando sus hechos con lo que otros han hecho en su apogeo. Analizar someramente la historia de nuestros hechos en todo el mundo y de los cuales tendriamos que estar orgullosos es precisamente mi proposito, asi como escudriñar, en nuestra psique personal, nuestra herencia genetica que, tanto si es de Bismarck, como si no, aquel (al que se le atribuye) la encuadra con una innegable rotundidad. Decia: España es el pais mas fuerte del mundo: los españoles lo han estado intentando destruir por siglos y aun no lo han conseguido.
La historia de España ya está escrita, reescrita, interpretada, reseñada y glosada con toda la seriedad científica y ética que requiere un asunto de tal transcendencia, además de que se vuelve a ella con cierta frecuencia, así que, volver a hablar sobre algo ya escrito y oficial como es nuestra historia, donde tantas lumbreras se han volcado y algunas estrellado, parecería una osadía inaudita. Pues eso es lo que voy a hacer y si no lo quieres leer, ya puedes cerrar el libro sin dilación, aunque si lo haces nunca sabrás lo que ha transcurrido por mis calenturientas neuronas. Verás, y antes de que te apresures, tú y yo somos personas serias y hemos leído con harta frecuencia este tema, o sea, la historia oficial -que no la infra-historia- de España y muchas glosas de última hora. Esta será otra, pero no una más de tantas, sino siguiendo su evolución o devenir en temas que respondan a la inquietante y persistente pregunta de si España es o no es una "nación" o una "nación de naciones" como muchos propugnan, creen y se empecinan en el asunto.