El uso de catéteres vasculares para diferentes actividades terapéuticas (como la administración de fluidos, fármacos, hemoderivados o nutrición parenteral, o la depuración sanguínea extrarenal) y diagnosticas (como la monitorizacion hemodinamica o la administracion de contrastes) es una practica muy habitual en la medicina moderna. En España mas del 60 % de los pacientes hospitalizados en instituciones sanitarias para agudos son portadores de un cateter vascular durante una parte o la totalidad de su ingreso.Asimismo, son muy numerosos los enfermos que precisan de un dispositivo vascular permanente para la administracion prolongada, en regimen ambulatorio, de determinados tratamientos. La infeccion relacionada con este tipo de dispositivos medicos es una complicacion frecuente que puede comportar una morbilidad y una mortalidad relevantes, una prolongacion de las estancias hospitalarias y, en definitiva, un incremento de los costes sanitarios. En los ultimos años, se ha producido un aumento considerable en los conocimientos sobre la patogenia, la epidemiologia, la terapeutica y, especialmente, la prevencion de este problema de salud que afecta a multitud de pacientes portadores de cateteres vasculares, tanto hospitalizados como en regimen de terapias ambulatorias.