Un joven filósofo, un escultor de mediana edad y una bella mujer componen el atípico triángulo amoroso en esta novela donde amor, pasión, arte y misterio se fusionan en una espiral donde cada unos de los protagonistas se dejará arrastrar por aquellos aspectos de su personalidad que permanecen en el lado más oscuro. El deseo se convierte en el motor principal del comportamiento de los protagonistas, cuyas decisiones y actitudes van encaminadas a conseguir unos fines cuyo propósito va más allá de la pura lógica y moralidad aceptada socialmente. La novela se adentra de este modo en los aspectos ocultos de la personalidad humana, en el deseo, en los instintos, haciendo reflexionar al lector sobre ese otro yo que forma parte de nosotros mismos y que muchas veces desconocemos, esa identidad que, a veces, se oculta al otro lado del espejo. Todo eso puede suceder cuando "el deseo es el deseo".
Novela intimista ambientada en el París bohemio de finales del XIX que toma como protagonista al pintor Henri de Toulouse-Lautrec y como argumento el que pudo ser un episodio de su vida en torno a la creación del retrato de Céline, joven prostituta y bailarina de cabaret, con quien entabla una relación sentimental a través de la cual nos acercamos a su compleja personalidad atormentada y su insaciable espíritu creador. Adentrándonos en las noches de Montmartre los bebedores de absenta exorcizan sus demonios, los lenocinios erotizan su cotidianeidad con perfumes de mujer y humo de cigarros, los escenarios donde se proyectan las luces y sombras entre candilejas, así asistimos a la vida parisina de los bajos fondos, donde algunos esperan que sus sueños se conviertan en una nueva oportunidad mientras la ciudad avanza en continuo cambio hacia el progreso y la modernidad. Bermellón es un fresco literario siguiendo los mismos patrones que hubiera utilizado el propio Toulouse-Lautrec con una copa del hada verde en la mano frente a una tela en blanco dispuesta a dar forma a sus delirios e imaginaciones.
Como a una sucesión de secuencias aparentemente casuales, asistimos a diferentes momentos de la vida de Cayetana Suanzes, Tana, en el transcurso de nueve años de su vida durante los cuales irá avanzando (deambulando entre el amor, la amistad, la búsqueda, el desengaño), desde la íntima creencia en el ser humano, hacia la aceptación de sí misma y del mundo.
Estimado lector, este libro que tienes en tus manos forma parte de una de esas raras ocasiones en las que dos artistas coinciden en el ámbito evolutivo de una obra conjunta y su concepción estética sin abandonar sus individualidades. Un tándem expresivo, podríamos decir, que se manifiesta a través de símbolos complejos, ecuaciones lúdicas y permutaciones estilísticas de gran profundidad estética. Los autores se muestran como alquimistas de la palabra desgranando conceptos amorosos, poéticos, filosóficos y metafísicos esperando la total connivencia del lector. Este aspecto es el que más destaca en esta exquisita obra a medio camino entre la prosa, la poesía, el ensayo conceptual o el prontuario entre místico y estético, tan difícil de interpretar. Querido lector, para sacarle todo el jugo a esta obra lo más recomendable es invitarte a que te sumerjas en ella y navegues recorriendo el orden natural de los capítulos; o a tu aire, libremente, surcando las páginas hacia la profundidad, la costa o los arrecifes de coral de sus pretenciosos significados.