Cuarenta y siete años antes de que Art Spigelman revolucionara el cómic narrando en Maus la Segunda Guerra Mundial con gatos y ratones, el ilustrador francés Edmond-François Calvo ya había publicado en plena Guerra Mundial un tebeo en el que convierte en lobos a los nazis de Hitler, en conejos a los franceses, en osos a los rusos y en perros bulldogs a los britanicos. Con guion de Victor Dancette y Jacques Zimmermann, Calvo dibujo dos volumenes, La bestia se desata, que aparecio en 1944, en plena guerra, y La bestia es derrotada, fechado en 1945. Ambos integran "¡La bestia ha muerto!", un album de gran formato y a todo color, con un estilo que recuerda a Walt Disney y a los dibujos animados de Tex Avery, que se viene publicando en Francia periodicamente y hasta ahora permanecia inedito en España. Calvo influyo poderosamente en Albert Uderzo, el creador de Asterix, que lo visito de joven.