Sansón. El jardín del asfódelo se sitúa en Israel, en el siglo XIII antes de Cristo, cuando los antiguos hebreos se organizaban en régimen tribal y eran gobernados por los jueces. Esta obra es la historia de Sansón, el último Juez de Israel, y la de quienes lo conocieron y amaron. Todo empieza con los recuerdos del lazarillo que condujo al juez ciego hasta las columnas del palacio que derrumbó con su fuerza prodigiosa. Desde ese punto de partida la novela discurre por una red de destinos que se cruzan en la mítica figura del Juez Bíblico. A veces, Sansón se vuelve una referencia, desaparece del primer plano para que personajes que están a su alrededor adquieran la silueta de protagonistas. El perfil de Dalila, lejos de ser una aportación más a la página misógina de la historia, es parte integrante de la tragedia, no la típica representación del mal encarnado en una mujer que impide que llegue a desarrollarse felizmente el camino del héroe masculino. La historia de amor entre Sansón y Dalila tuvo un fin trágico para ambos. Pero no fue oscuridad todo lo que rodeó el fin de los días del último Juez de Israel como muestra esta ficción que comienza en el antiguo Valle de Dan.