Uno de los más grandes exponentes del surrealismo, André Breton, llegó a México en abril de 1938, a partir de esa fecha y durante casi cuatro meses, sus apariciones pú-blicas fueron escasas, contrariamente a lo que se esperaba antes de su llegada. Mu-chas fueron las causas de su poca participacion en el ambito cultural mexicano y en estas paginas se intenta esclarecer en que consistio el quehacer del poeta en Mexico, las reacciones que produjo con su llegada al pais, y los problemas a los que se en-frento como estandarte del surrealismo.