De un tiempo a esta parte siento que la publicidad se nos ha ido de las manos. Se han llenado los escaparates de moda fluorescente. Las vallas publicitarias están decoradas con mujeres con poca ropa, que parecen mirarte con cara de vicio? y las campañas promocionales utilizan colores tan agresivos que no me permiten recordar lo que anuncian, pasado un rato. Por desgracia, los libros han seguido el mismo camino. Las portadas compiten en las estanterias por llamar nuestra atencion. Nos provocan. Agitan nuestros sentidos. Nos violentan. Y, pese a su pertinacia, nosotros pasamos de largo sin comprarnos nada. Porque hemos dejado de creer en los reclamos de las grandes marcas. Porque todos los libros parecen ser siempre el mismo libro.Nunca he visto un libro sin portada y por eso he querido crearlo yo. Pense que seria divertido dejarla en blanco. Asi el lector, que es el que paga, durante unos segundos, tendra permiso para imaginar que ha encontrado lo que andaba buscando. Ademas, si tienes niños en casa, dejales que dibujen sobre la hoja en blanco. Deja que la decoren ellos mismos con dibujos de los animales que vieron en el zoo o con una caricatura de su maestra. O quiza quieras hacerlo tu mismo. ¡Juega a ser niño! Quiza tu, mientras hablas por telefono, sobre la mesa de la cocina, sientas la necesidad de garabatear sobre la portada del libro. Hazlo sin miedo. La he dejado en blanco para ti. Para que pintes algo en este libro. Porque el lector, o asi lo siento, es el unico capaz de darle vida a este manantial de signos dormido.
CONTENIDO: De un tiempo a esta parte siento que la publicidad se nos ha ido de las manos. Se han llenado los escaparates de moda fluorescente. Las vallas publicitarias están decoradas con mujeres con poca ropa, que parecen mirarte con cara de vicio y las campañas promocionales utilizan colores tan agresivos que no me permiten recordar lo que anuncian, pasado un rato. Por desgracia, los libros han seguido el mismo camino. Las portadas compiten en las estanterias por llamar nuestra atencion. Nos provocan. Agitan nuestros sentidos. Nos violentan. Y, pese a su pertinacia, nosotros pasamos de largo sin comprarnos nada. Porque hemos dejado de creer en los reclamos de las grandes marcas. Porque todos los libros parecen ser siempre el mismo libro. Nunca he visto un libro sin portada y por eso he querido crearlo yo. Pense que seria divertido dejarla en blanco. Asi el lector, que es el que paga, durante unos segundos, tendra permiso para imaginar que ha encontrado lo que andaba buscando. Ademas, si tienes niños en casa, dejales que dibujen sobre la hoja en blanco. Deja que la decoren ellos mismos con dibujos de los animales que vieron en el zoo o con u na caricatura de su maestra. O quiza quieras hacerlo tu mismo. ¡Juega a ser niño! Quiza tu, mientras hablas por telefono, sobre la mesa de la cocina, sientas la necesidad de garabatear sobre la portada del libro. Hazlo sin miedo. La he dejado en blanco para ti. Para que pintes algo en este libro. Porque el lector, o asi lo siento, es el unico capaz de darlevida a este manantial de signos dormido.AUTOR:Doctor cum laude por la Universidad Pablo de Olavide. Licenciado en Filologia Hispanica por la Universidad de Sevilla. Profesor de Lengua y Literatura y Secretario del IES Alfonso XI. Ha publicado las novelas Menta y nata y Magia para torpes.Ha obtenido galardones como: ganador del Gallo de Vidrio de Poesia con "Yo"; premio del publico en el Certamen Simprota con "La Mancha de Dulcinea"; ganador del Premio Antigona de Creacion Teatral con "El Protagonista Muere"; ganador del Concurso de Dos Hermanas de Cartas de Amor y finalista del Ateneo Joven de Novela con Menta y nata.
Casi nadie sabe que la cena que dio origen a la Generación del 27 la pagó Sánchez Mejías, presidente del Betis, amigo de Lorca, torero y escritor. Casi nadie sabe que fuimos campeones de Liga poco antes de que estallara la Guerra Civil y de que la contienda disolviera aquella colosal plantilla. Casi nadie sabe que el fusilamiento de Lorca guarda relación con la ciudad de Sevilla, con el Betis, con Luis Cernuda y con Queipo de Llano. Rafael Gordillo y la Copa de 2005. La fundación del club. Y, entre tanto, una historia de amor ambientada entre Sevilla y Granada. Porque mientras el mundo se desmorona los seres humanos tenemos la estúpida costumbre de enamorarnos. Por esos esta es una novela sobre fútbol y literatura, que mezcla los polos opuestos de la vida, sensaciones tan dispares como la menta y la nata. La primera novela histórica sobre fútbol. Y sobre el Betis.