Hasta que el alma aguante es un compendio de textos y autores que forman parte del itinerario vital y literario del autor: Antonio Machado, Córdova Iturbe, Gibran, Salinas, Rumi, Ángel González. No es una novela al uso, puesto que entremezcla diferentes géneros y estilos: prosa, poesía, ensayo, artículos, memorias, etc. Podríamos considerar que estamos ante un conjunto de relatos cortos engarzados.
Este ensayo sobre la enfermedad miliar infantil llamada Muguet...(1790) es una obra pionera en la estomatología española, ya que es la primera descripción del Muguet conocida en España y pudiera ser conocida como el documento inaugural de la estomatología pediátrica científica española. Encabezada por un capítulo introductorio que adopta el formato de una topografía médica de la ciudad de Barcelona, en la obra destaca el conocimiento de la medicina que demuestra su autor, y la propuesta de inmunización activa frente a la enfermedad, aunque basada esta última en una observación errónea. El trabajo de Francisco Sanponts que aquí presentamos recibió el primer premio del certamen convocado por la Real Sociedad de Medicina de París. Se publicó en latín en 1790 en las Memorias de la citada Sociedad correspondientes a 1787 y 1788. Este documento se conserva en la Biblioteca del Palacio Real.
A solas, en silencio, contigo y EL Max, la segunda entrega de Romero Maroto, establece con respecto al libro anterior nuevas claves poéticas y una diferente perspectiva en la búsqueda del la esencia del alma humana y su relación con Dios. Su obra busca al hombre de la misma manera en que lo hacen Antonio Machado o Ibn Al-Rumi, a través del silencio y de la soledad como caminos para legar al alma. Heredero directo de la tradición lírica española, reivindica el amor como alma de la poesía y el paisaje, la naturaleza y su tierra manchega, como entorno para la contextualización del poema. Un erotismo sutil late con fuerza en el trasfondo de su obra y de su búsqueda incesante de la mujer idealizada, de arrebatadora pasión y subyugante belleza, encarnada en los nombres de Sandra, Susana, Isabel... en un juego, no exento de riesgo, en que se mezclan realidad y fantasía, vida y muerte. Además, en este libro tienen un especial protagonismo las visiones fotográfica y plástica que aportan una serena belleza al poema y que nos invitan a descubrir, en la sencillez aparente de los versos, un plano introspectivo de la topografía de los sentimientos.