«Me llamo Azad Shero Selim. Soy nieto de Selim Malai. Mi abuelo tenía un gran sentido del humor. Decía que había nacido kurdo en una tierra libre. Luego llegaron los otomanos y le dijeron: Tú eres otomano. Y así fue como se convirtió en otomano. Cuando el Imperio otomano cayó, pasó a ser turco. Los turcos se fueron y él volvió a ser kurdo en el reino de Sheik Mahmud, rey de los kurdos. Al llegar los ingleses, mi abuelo se convirtió en súbdito de Su Graciosa Majestad, e incluso aprendió algunas palabras inglesas. Los ingleses inventaron Irak. Mi abuelo se convirtió en iraquí, pero jamás llegó a comprender el enigma de aquella nueva palabra, Irak, y, hasta su último aliento, nunca se sintió orgulloso de ser iraquí. Su hijo, es decir, mi padre, Shero Selim Malai, tampoco. Pero yo, Azad, todavía era un niño.» El fusil de mi padre es la historia real de un niño que vive las situaciones más adversas pero que conserva siempre las ganas de vivir, el humor y los sueños. Mientras tanto, su padre tiene a punto un viejo fusil ruso, un primo adiestra palomas acrobáticas y un hermano lucha en las montañas. Como escribe el autor: «Yo quería hablar de los kurdos de Irak, que soñaban con una vida feliz y vivieron un desastre. Pero no quería escribir como un hombre político: todo es visto a través de la mirada de un niño. Eso me permitió evocar cosas muy serias con soltura».
Hiner Saleem zinegile eta idazle kurduak bere haurtzaroa kontatzen du liburu honetan. Eta bere haurtzaroa kontatzeko beretarren -bere familia hurbilaren eta kurduen- historia kontatu behar digu, Saddam Hussein aginpidera iritsi aurretxoan hasita, harik eta, 17 urte zituela, Iraketik ihes egin behar izan zuen arte. Ihes egin eta gero, zinemagile lanak egin ditu. Vodka Lemon da bere azken film luzea, Veneziako 2003ko zinemaldian San Marco saria jaso duena. Nire aitaren fusila 2004ko otsailean argitaratu zen lehen aldiz, arrakasta handiz, oso denbora laburrean hizkuntza askotarako bidea egin baitu.