Desde hace años, saltan continuamente alarmas que nosalertan sobre los grandes peligros que nos amenazan. Sinembargo, nunca el mundo ha sido tan poco violento comohoy, y la libertad, la tolerancia, la educacion y la salud hanprogresado en proporciones insospechadas.En contra de las ideas preconcebidas, el autor nos hace veruna humanidad que progresa. Centenares de cifras, estadisticase informes internacionales solidos dibujan una conclusion inapelable:mayoria de democracias en el mundo; disminuciondel 50 % de la mortalidad maternoinfantil desde 1990; erradicacionplanetaria de la viruela; reconstitucion de la capa deozono; redescubrimiento de mas de 350 especies de animalesque se daban por desaparecidas; el numero de paises que hanabolido la pena de muerte se ha multiplicado por 13 desde1950; los homicidios han caido un 65 % en veinte años, etc.Lejos de perder de vista la realidad, este libro se apoya endatos contrastados que invitan a la esperanza. Una esperanzanecesaria para hacer frente a los discursos catastrofistas quenos llevan al inmovilismo, cuando no a la sumision a politicasautoritarias.Si queremos vivir en un mundo mejor, debemos ser conscientesde los progresos que hemos conseguido e inspirar cambiosque mejoren la sociedad en lugar de limitarnos a criticarlo que no funciona. A tal fin nos c...
Lejos de perder de vista la realidad, este libro se apoya en datos contrastados que invitan a la esperanza.Desde hace anos, saltan continuamente alarmas que nos alertan sobre los grandes peligros que nos amenazan. Sin embargo, nunca el mundo ha sido tan poco violento como hoy, y la libertad, la tolerancia, la educacion y la salud han progresado en proporciones insospechadas.En contra de las ideas preconcebidas, el autor nos hace ver una humanidad que progresa. Centenares de cifras, estadisticas e informes internacionales solidos dibujan una conclusion inapelable: mayoria de democracias en el mundo; disminucion del 50 % de la mortalidad maternoinfantil desde 1990; erradicacion planetaria de la viruela; reconstitucion de la capa de ozono; redescubrimiento de mas de 350 especies de animales que se daban por desaparecidas; el numero de paises que han abolido la pena de muerte se ha multiplicado por 13 desde 1950; los homicidios han caido un 65 % en veinte anos, etc. Lejos de perder de vista la realidad, este libro se apoya en datos contrastados que invitan a la esperanza. Una esperanza necesaria para hacer frente a los discursos catastrofistas que nos llevan al inmovilismo, cuando no a la sumision a politicas autoritarias.Si queremos vivir en un mundo mejor, debemos ser conscientes de los progresos que hemos conseguido e inspirar cambios que mejoren la sociedad en lugar de limitarnos a criticar lo que no funciona. A tal fin nos conduce el "optirrealismo", el realismo optimista que contagia esta obra.