Este librito que tiene el lector en sus manos recoge cuatro ponencias del autor, entrelazadas por dos hilos temáticos afines: las lenguas y los derechos fundamentales, y el lenguaje jurídico. Los dos primeros estudios analizan, en efecto, diversos aspectos de la ordenacion constitucional de las lenguas de España. Profundizar en la libertad de la lengua -libertad cuya frecuente invocacion no se corresponde con su un tanto raquitico desarrollo tecnico-juridico- como principio clave del Estado de Cultura y encuadrar, dentro de los principios de merito y capacidad, la exigencia de conocimientos linguisticos (tanto de idiomas extranjeros como de lenguas vernaculas) a los funcionarios son las dos inquietudes principales que impulsan ambos trabajos. Los dos ultimos estudios versan sobre el lenguaje juridico. La antigua, y hoy reavivada, preocupacion por la mala calidad comunicativa y gramatical del lenguaje juridico (legal, administrativo, jurisprudencial) apenas ha contado hasta ahora con estudios de investigacion y practicos. Sin embargo, rompiendo con ese vacio bibliografico, el autor lleva a cabo un diagnostico sobre la situacion actual del lenguaje administrativo castellano, y asimismo nos ofrece un cuerpo de propuestas para la mejora del lenguaje legal: un conciso pero enjundioso Manual de Estilo para aquellos cuyo quehacer les exige intervenir en la redaccion de normas juridicas, pero tambien muy util para la redaccion de documentos juridicos en general.
Encuadernación: Rústica semirrígida y cubierta gris. Coeditado con el Servicio de Publicaciones de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (1991).