El ensayo que ahora se presenta trata de poner de relieve los elementos, no siempre explícitos, que se sitúan tras este proceso de modernización. Elementos más bien ocultos, a veces despreciados por los estudiosos, y que conforman un hecho ideologico de progreso y de avance emancipatorio que puede llegar a enturbiar la realidad de la modernidad, no tanto como acontecimiento frustrado cuanto como proceso complejo, y en cierto modo engañoso. En este sentido, no se trata de un trabajo historico de "acarreo" de materiales, nuevos o ya conocidos, sino mas bien de una reflexion critica centrada en la revelacion de las raices teologicas del pensamiento moderno, y en la continuidad entre las grandes lineas del pensamiento medieval, en especial el nominalismo; y las grandes lineas del pensamiento moderno, no ya a nivel teorico, sino al nivel de la propia gobernabilidad legitimadora de procesos de libertad y dominio.