Jordi Riba és professor de filosofia a la Universitat Autònoma de Barcelona, professor visitant a la Universitat Paris 8 i membre associat al seu laboratori d’estudis i investigacions «Logiques contemporaines de la philosophie». La seva recerca actual se centra en l’estudi del paper de la filosofia en les formes democràtiques emergents. També, a més del treball sobre el filòsof francès del segle xix, Jean-Marie Guyau, ha desenvolupat el tema de la crisi permanent com a eina interpretativa de la modernitat. Ha publicat, entre d’altres, Republicanismo sin república (Barcelona: Bellaterra, 2014); La Fraternité réveillée (París: Harmattan, 2016); Un nouveau regard sur la solidarité (París: Harmattan, 2018), els dos darrers coordinats amb Patrice Vermeren; Crisis permanente (Barcelona: Ned ediciones, 2021) i Alain Badiou: Allò polític i la política (Barcelona: Gedisa, 2018 en català i 2021 en castellà).
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L’obra d’Abensour mostra la utopia i la democràcia com un element cabdal i d’actualitat, per aproximar-se de manera renovada a la comprensió dels nous moviments socials emerge
Nuestra epoca está marcada por fenómenos globales que provocan una crisis tras otra. Confiamos en que sería posible salir de estas y que cada generación vivirá mejor que la anterior, pero la inestabilidad en todos los ambitos ha generado un malestar creciente y constante. Vivimos en una "crisis permanente" y las viejas ideas de desarrollo se muestran incapaces de lograr soluciones efectivas o perdurables. Este concepto renovado, que aparece en escritos contemporaneos de Koselleck, Ricoeur, Beck o Bauman, no solo nos exige su comprension, sino que nos obliga a un cambio en la manera de pensar y actuar. En la linea de Jean-Marie Guyau, Jordi Riba analiza la idea de "crisis permanente" como un motor de cambio positivo, sin necesidad de romper con el modelo democratico. La democracia es un proceso sin fin, pero precisa ser renovada por la accion ciudadana. No hay democracia sin crisis y aquella no se sostiene sin el ejercicio fraterno de sus componentes. La metafora de la fraternidad integradora y huerfana de liderazgos ilustra la situacion en la que la humanidad se encuentra y sobre la que es posible levantar un nuevo proyecto de modernidad y convivencia solidarias.