Los sonetos de Juan de Arguijo abordan temas cl¡sicos, pertenecientes sobre todo a la mitologa grecorromana o a su historia, o son de intencin filosfico moral. Perfecto en su forma, su exquisita y elaborada plasticidad resulta con frecuencia demasiado estudiada no obstante, consigue muchos aciertos de expresin.
Don Juan de Arguijo (1567-1622), Veinticuatro de Sevilla, fue uno de los sucesores naturales de la poesía de Herrera y uno de los primeros en abrir las puertas al Barroco español. Su estrecho contacto con la intelectualidad sevillana de rama mal-larista le permitiría acceder a una tradición literaria de la que llegaría a ser uno de sus principales representantes. Recordado como una de las cotas más altas de producción poética del Renacimiento español y un verdadero maestro en el arte del soneto, el nombre de Arguijo jamás ha sido descuidado en una antología o en una relación de poetas relevantes de los siglos áureos. Su obra tuvo la fortuna de poner su grano de arena, y grande, en el proceso de formación y maduración, de refinamiento y realización de las posibilidades internas del español como lengua poética. Esa fue la gran aportación del poeta Arguijo a la literatura. Y la perfección formal de sus sonetos.
Esta edición definitiva de la poesía completa de Juan de Arguijo (Sevilla 1567-1623) está precedida de una extensa y erudita introducción que, sin duda, va a convertirse en el estudio de referencia del poeta sevillano, un autor poco conocido pero de extraordinaria calidad literaria.Poeta mitológico, sonetista esmerado, gran conocedor de la historia antigua y de todos sus mitos, Juan de Arguijo fue además músico, hombre público en su ciudad y mecenas de artistas y poetas. Sus sonetos están a la altura de clásicos ineludibles como Lope de Vega o Quevedo.