LOLA CANALES

El mundo, desde luego, no ha dejado de girar y ahora parece que lo empujan los vientos de la derecha. No es de extrañar. Corren tiempos inseguros, muy veloces, todo cambia de la noche a la mañana, la globalización transporta lo malo y lo bueno de un lado a otro del planeta, dando la sensación de que vivimos sobre arenas movedizas. Los arrogantes neoconservadores, los desorientados progresistas, los grupos neonazis, el fanatismo religioso, el terrorismo islamista, la inmigración masiva, el paro, la naturaleza rebelada contra la mano que la maltrata, el acoso y derribo al otro en todas sus formas, a todas las edades y para todas las razas, la mediocridad de los gobernantes, el afán de adquirir, obtener, comprar o robar goces y disfrutes que merman nuestras fuerzas creando complejos de culpa, ansiedad y angustia, la búsqueda errática de una felicidad que no llegará... Todo ello conforma una sociedad temerosa, más perpleja que curiosa.No hay otro remedio que pararse a tomar aire y echar un vistazo a nuestro alrededor. Canjear el miedo por la esperanza. Y rastrear los acontecimientos que nos inquietan para descifrar el sudoku en que se ha convertido el mundo. A eso ayudan estas páginas, una guía para descubrir por dónde van hoy los tiros, hurgando en las causas y desnudando las intenciones.

Es la historia de Lola Canales, que fue detenida el 3 de diciembre de 1968 por la Brigada Político Social. La mayor parte de esta historia se desarrolla en la cárcel de Ventas. Relata las torturas en la Dirección General de Seguridad, el encuentro con las presas políticas de la cárcel el día de Nochebuena, las artimañas para enviar mensajes clandestinos a otras cárceles, la huelga de hambre, el Consejos de Guerra Sumarísimo contra ella y otros compañeros universitarios, todos acusados de Rebelión Militar, por lo que fueron condenados impunemente, sin pruebas. Éstas son algunas de las experiencias por las que pasó hasta el 3 de diciembre del año siguiente, cuando salió en libertad de la cárcel de mujeres de Alcalá de Henares.