Cuanto más cerca estaba de él…más grietas aparecían en la armadura tras la que se escondía.
El playboy más deseado de Italia, Gianluca Benedetti, no reconocía a Ava Lord, aquella preciosa dama de ho
Retenida y seducida al mismo tiempo.La secreta agorafobia de Lulu Lachaille no iba a impedirle acudir a la boda de su mejor amiga. Llegado el día, Lulu se sentía completamente fuera de lugar, pero no era eso lo que hacia que su corazon palpitara desbocadamenteEl esceptico padrino y leyenda del polo, Alejandro du Crozier, odiaba las bodas ¡Hasta que se quedo aislado en las Highlands escocesas con la seductora dama de honor!La tentacion que representaba la inexperta Lulu era irresistible para Alejandro. Y estaba decidido a mantenerla cerca, e incluso llevarla consigo a Buenos Aires, hasta asegurarse de que su irrefrenable atraccion mutua no habia tenido consecuencias.Retenida y seducida al mismo tiempo.La secreta agorafobia de Lulu Lachaille no iba a impedirle acudir a la boda de su mejor amiga. Llegado el día, Lulu se sentía completamente fuera de lugar, pero no era eso lo que hacia que su corazon palpitara desbocadamenteEl esceptico padrino y leyenda del polo, Alejandro du Crozier, odiaba las bodas ¡Hasta que se quedo aislado en las Highlands escocesas con la seductora dama de honor!La tentacion que representaba la inexperta Lulu era irresistible para Alejandro. Y estaba decidido a mantenerla cerca, e incluso llevarla consigo a Buenos Aires, hasta ase...
Quando Rose Harkness, a proprietária da agência matrimonial Encontro com o Destino, se aproximou de uma famosa equipa de hóquei para lhes fazer uma proposta arriscada, sabia que estava a pôr à prova a sua capacidade para manipular os homens? Não demoraria muito a perceber de quem mais gostava na equipa, o seu dono, Yuri Kuragin, que era um homem completamente impossível de manipular. O facto de ser rico e bonito dera a Yuri os privilégios de uma estrela do rock no que dizia respeito às mulheres, mas Rose negou-se a converter-se em mais uma seguidora, apesar de o seu corpo estar a morrer pelas suas carícias.