No hay que mezclar el fútbol con la política… más que nada porque es innecesario: viven juntos desde que el balón echó a rodar. En cualquier parte del planeta la fascinación que provoca el deporte de masas por excelencia va de la mano de su relacion con las esferas del poder. Da igual la ideologia o la epoca, momentos de paz o cuando el mundo arde bajo el ruido de las armas. El futbol fue un pilar en la Italia de Mussolini o en la España de Franco, como lo fue en la Union Sovietica con la figura de Lavrenti Beria o en la Alemania Oriental con la cabeza de la Stasi al mando del Dinamo de Berlin. Lo fue en las dictaduras Sudamericanas de los años 70 y en los procesos de independencia de los paises africanos.Este libro recoge treinta historias reales de esa relacion entre el futbol y el poder, episodios en los que, al final, aparecen dramas humanos de jugadores, entrenadores o directivos que se vieron en medio de ese potente atractivo que el balompie provoca en los politicos sea cual sea su ideologia raza o color. Personajes grandes y pequeños de un deporte poderoso como ningun otro.