Miguel Vila

Fabio, hermano de Irene, se siente atraído por Catia, que no acaba de encontrarse cómoda en sí misma. El apocado Andrea, sometido al maltrato de su novia, se está interesando peligrosamente por Giulia, que trabaja en su tesis mientras trata de reparar su amistad con Irene, quien por su parte ha empezado a intimar con Rocco, carnicero en el super donde trabaja de cajera, un cincuenton que todavia vive con sus padres. En la periferia de Padua laten los apetitos y el descontento de un puñado de hombres y mujeres, sintomas de si mismos, cada uno atrapado en sus propios secretos y mentiras.

“No pasa nada”, dice Marco. Pero algo pasa. La conducta de Stella con otros hombres empieza a resultarle incómoda, y su relación se está viendo afectada. “Habría que hablarlo”, se dice, pero se lo di