El término símbolo deriva del griego symbolon, que inicialmente designaba el reconocimiento obtenido partiendo un objeto en dos trozos. Dos personas que, antes de alejarse, querían conservar una muestra o una prueba de su relación, se quedaban, cada una de ellas, con una parte del objeto. Después, cuando se volvián a ver podían juntar los dos trozos como recuerdo y testimonio de las relaciones que las habían unido en el pasado.