Las muñecas de papel de nuestra época eran un entretenimiento barato y muy instructivo. Se recortaban con tijeras especiales para niños, de esas que no cortaban nada, así que casi siempre teniamos que recurrir a la ayuda de mama para que nos ayudara en tan dificil tarea; aunque tampoco es que fuera sencillo no pasarse de la raya recortando los vestidos: ¡cuantas manos y pies nos habremos llevado por delante! Estas muñequitas de papel soportaron estoicamente el maltrato de nuestras manos infantiles, torpes con las tijeras, y sus delicados cuellos sufrieron a menudo varias operaciones de estetica gracias al socorrido celo, que los mantenia firmes. Con este libro deseamos que las personas que en su niñez jugaron con las muñequitas de papel vuelvan a recordar aquellos bonitos momentos y revivan de nuevo esos tiempos. Bienvenido/a, pues, a nuestro particular tunel del tiempo. ¡EL REGALO MAS BONITO PARA ESTAS NAVIDADES!