La expansión de la psiquiatría y la psicología en los últimos decenios, la hegemonía del modelo biomédico en salud mental y la transformación de la atención sanitaria en un mercado extraordinariamente rentable, son algunos de los factores que favorecen que se dañe a los pacientes.Todo ello amparado en una autoridad que muchas veces esta basada en conocimientos pseudocientificos, y que ejerce su poder imponiendo una unica forma de entender los problemas mentales y transgrediendo en muchas ocasiones los derechos humanos de los pacientes.Desde una actitud critica y esceptica con la psiquiatria oficial biomedica, se buscan alternativas que reequilibren el poder entre el profesional y el paciente, del que se busca y se precisa su participacion activa en todo el proceso de su recuperacion.
La hegemonía del modelo biomédico en salud mental y la transformación de la atención sanitaria en un mercado extraordinariamente rentable, son factores que favorecen la práctica iatrogénica: abuso de la farmacologia, intervenciones preventivas sin fundamento, el uso de etiquetas diagnosticas reduccionistas y estigmatizadoras o la aplicacion de tratamientos excesivos, innecesarios o inadecuados que trasgreden con frecuencia los derechos humanos de las personas atendidas. Otra teoria y otras practicas de cuidado son posibles. He aqui la razon de la reedicion ampliada de Hacia una psiquiatria critica, donde Alberto Ortiz Lobo y Juan Gervas, Vicente Ibañez, Ivan de la Mata, Eva M. Muñiz desgranan practicas alternativas que nos hacen ver otras formas de entender y cuidar el sufrimiento psiquico, desde el respeto y la autonomia de las personas afectadas.