A principios de los años 70, con España sumida en una profunda crisis económica y con un régimen obsoleto e incapaz de dar respuesta a las demandas de los ciudadanos, éstos comenzaron a organizarse por si mismos en busca de soluciones a los graves problemas que padecia la sociedad española. Fue la edad de oro de los movimientos sociales, como las asociaciones de vecinos, los circulos culturales y los sindicatos. Muchos españoles, educados en una dictadura que no permitia otros cauces de participacion publica, tuvieron en estos grupos toda una 'escuela de ciudadania', donde se formaron en los mecanismos de dialogo propios de una democracia.