Polidoro Virgilio, humanista nacido en Urbino, publicó en 1498 en Venecia un librito titulado Proverbiorum libellus, que recogía tres centenares de proverbios latinos con breves comentarios. Aún faltaban dos años para que naciera la Adagiorum collectanea de Erasmo de Rotterdam, el embrion de la que habria de ser, tres decadas despues, la mas completa y erudita coleccion de adagios griegos y latinos glosados. Como Erasmo, cuyo libro llego a alcanzar mas de cuatro mil entradas, Polidoro tambien entendio que debia ser una obra abierta, susceptible de revisiones y continuas ampliaciones. La mas importante llego en 1521: la exigua coleccion de trescientos proverbios de origen profano se vio aumentada con la adicion de setecientos procedentes de las Sagradas Escrituras. Fue la respuesta del autor a los años convulsos que vivia la Europa catolica, prendida ya la llama del luteranismo. Si en las glosas de la primera parte el lector hallara anecdotas, relatos y curiosidades que hunden sus raices en la cultura clasica, en la segunda parte, los llamados Adagios sagrados, encontrara, junto con la explicacion de su origen, sentido y uso, numerosas evidencias del espiritu reformista de Polidoro, afin en muchos aspectos al pensamiento de Erasmo.