Numerosos contemporáneos afirmaron que en el siglo XVIII no se iba al teatro «por la comedia sino por los sainetes» y que la representación de la obra principal se tomaba «como mero pretexto para los mismos». Transidos de realismo, al arrimo de los problemas sociales y políticos y de las preocupaciones de actualidad, en los sainetes de Ramón de la Cruz se desarrolla la nueva concepción del teatro que abre el camino a la comedia moderna. Para ofrecer una imagen completa y orgánica de la labor del gran sainetero madrileño, J.M. Sala Valldaura edita aquí sus piezas más célebres de don Ramón y una amplia muestra de otras menos conocidas o inéditas, partiendo en cada caso de los testimonios más fidedignos y significativos y tomando muy en cuenta las copias con apuntes y acotaciones que permiten la lectura más propiamente teatral de las obras.
Numerosos contemporáneos afirmaron que en el siglo XVIII no se iba al teatro «por la comedia sino por los sainetes» y que la representación de la obra principal se tomaba «como mero pretexto para los mismos». Transidos de realismo, al arrimo de los problemas sociales y políticos y de las preocupaciones de actualidad, en los sainetes de Ramón de la Cruz se desarrolla la nueva concepción del teatro que abre el camino a la comedia moderna. Para ofrecer una imagen completa y orgánica de la labor del gran sainetero madrileño, J.M. Sala Valldaura edita aquí sus piezas más célebres de don Ramón y una amplia muestra de otras menos conocidas o inéditas, partiendo en cada caso de los testimonios más fidedignos y significativos y tomando muy en cuenta las copias con apuntes y acotaciones que permiten la lectura más propiamente teatral de las obras.