Este libro sigue el análisis que el autor inició en su libro La obra de arte literaria publicado por la UIA en 1998. En el primer libro hizo un análisis de la obra de arte literaria, su naturaleza y su esencia. En esta segunda obra continua su analisis enfocando su atencion en el proceso de la comprehension de la obra de arte literaria.
Desde antiguo un peligro acecha a la teoría del conocimiento. Si el problema fundamental de esta disciplina filosófica es el conocimiento del conocimiento, ¿cómo llevar a cabo esta tarea sin suponer o utilizar aquello cuya esencia se pretende esclarecer? ¿No cae el mismo conocimiento que llevamos a cabo en el desarrollo de esta disciplina dentro del ambito de lo que hemos de investigar? Este libro constituye un ejemplo de reflexion filosofica genuina, animada por el espiritu de vuelta a las cosas misma que caracterizo a la fenomenologia y que inspiro toda la obra de Roman Ingarden
Roman Ingarden parte en este opúsculo de experiencias tan cotidianas y accesibles a todos como las de tener la responsabilidad de algo, asumir una responsabilidad, ser hecho responsable de algo o, en general, obrar responsablemente.De modo pausado, como si el pensamiento brotara por si mismo, investiga como tiene que ser la realidad para que el hombre pueda ser sujeto de tales experiencias, que son la base de toda imputacion: del derecho como de la moral. En el hilo claro y ordenado de la exposicion de Ingarden comparecen la libertad, la identidad del sujeto, la condicion sustancial de la persona y la estructura causal del mundo real, asi como una concepcion realista del tiempo, como condiciones de posibilidad de la experiencia indubitable del obrar responsable.Ingarden muestra en este enjundioso ensayo que sin acreditar un cierto realismo se desvanecen todas nuestras categorias morales y juridicas.
Roman Ingarden, mentor indiscutible de la filosofía fenomenológica en el medio polaco, no sólo no ha querido rehuir la consideración del problema axiológico, sino que incluso ha escrito acerca de él algunas de las mejores páginas de la filosofía de los valores del siglo XX. Las que componen Lo que no sabemos de los valores se cuentan ciertamente entre ellas.
Aparentemente estas lecciones tienen una finalidad meramente pedagógica. Se trata en ellas de hacer una presentación accesible y atractiva de la fenomenología para un